Tornillos oxidados de muesca ausente/ tuvieron que hacer palanca para levantar la placa/
las facciones del operario eran tan ríspidas como las de esa chapa/ todo metal, todo musgo/
conquistado por la curiosidad logré que al fin desprendieran esa cosa pegada por el tiempo/
una botella con líquido tóxico fue necesario derramar sobre ella/ no me quedaba más que implorar/
Retirada la plancha mi mirada se dio el gusto de ver qué se escondía tras ella:
un campo de trigos desde donde saludaba sonriente mi madre cuando ella solo tenía quince años.
las facciones del operario eran tan ríspidas como las de esa chapa/ todo metal, todo musgo/
conquistado por la curiosidad logré que al fin desprendieran esa cosa pegada por el tiempo/
una botella con líquido tóxico fue necesario derramar sobre ella/ no me quedaba más que implorar/
Retirada la plancha mi mirada se dio el gusto de ver qué se escondía tras ella:
un campo de trigos desde donde saludaba sonriente mi madre cuando ella solo tenía quince años.
2 comentarios:
Muy bueno!
Verónica Curutchet * Wilhemina Queen desde:
El Mundo de Wilhemina Queen
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No se por que hermano, pero esto me ha pegado fuerte. En pocas palabras te digo que odio los cementerios... escribí un blog completo con ellos y mis vivencias intentando exorsizar, pero nada che.
Muy bueno, quizás solo aparezcan huesos viejos y pasto seco, pero el que quiso ve otra cosa, muchas otras cosas.
Saludos
Senen
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